Una receta tradicional (un poco modificada) ideal como preentreno: las gachas de mosto.
Ingredientes:
– Zumo de uva.
– 200 gr de harina de avena por litro de zumo.
– 1 cucharada de canela.
– Canela en rama.
– Clavo
Preparación:
Extraer el jugo de uva triturándola bien (se puede usar batidora, robot de cocina…). A continuación colar para retirar los restos de pepitas y piel, aplastando bien para aprovechar todo el jugo posible.
Medir la cantidad de zumo de uva para calcular la cantidad de harina de avena a usar (200 gr por litro de zumo), retirar una pequeña cantidad para disolver la harina y poner al fuego el resto. Hervir el zumo retirando con una espumadera la espuma blanca que vaya soltando. Dejar al fuego, con la canela en rama y el clavo, hasta que el zumo se reduzca y concentre. Esto puede variar en función del tipo de uva, uvas muy grandes y con mucho zumo necesitarán más tiempo de reducción que las uvas más pequeñas y concentradas. El oscurecimiento del color será indicativo de que el mosto está listo.
A continuación añadir la harina de avena, previamente diluida en un poco de zumo de uva (agua fría en su defecto) y una cucharada de canela en polvo. Remover bien con una cuchara de palo hasta que la mezcla quede perfectamente integrada. Mantener a fuego lento durante unos 10 minutos removiendo de vez en cuando, hasta que haya espesado.
Una vez listo se vierte en recipientes, se adorna con almendra y se deja enfriar antes de servir. Lo recomendable es esperar unas 4-6 horas antes de comer, aunque lo ideal es dejarlo 24 horas para que endurezca y adquiera mejor textura.
Si la uva es dulce no precisa edulcorar, aunque opcionalmente se puede hacer si la fruta no da el dulzor deseado.